miércoles, 23 de noviembre de 2011

20N

 

 

(gracias a Lucas de FSC)

¿Dónde está el ‘tsunami’?

 Vicenç Navarro
Politólogo y economista. Catedrático de la Universidad Pompeu Fabra
Ilustración de Mikel Jaso
No hay plena conciencia en los mayores centros de los establishments políticos y mediáticos españoles del grado de descontento de la mayoría de la población hacia la clase política. Una de las expresiones utilizadas por el Movimiento 15-M para manifestar su desacuerdo con las políticas públicas altamente impopulares aprobadas durante los años de crisis por mayorías en las Cortes españolas (y en varios parlamentos autonómicos), es que tales políticos “no nos representan”, dicho que goza de una simpatía generalizada entre la población. Las encuestas de opinión popular expresan que la clase política se ha convertido en uno de los mayores problemas que existe en España.
Este desapego con las instituciones políticas está basado, en parte, en la naturaleza poco representativa del Parlamento, resultado de un sistema electoral poco representativo, hecho que se ha mostrado con toda claridad en las elecciones del 20-N.
La interpretación más común en los medios de mayor difusión españoles es que la población se ha movido hacia la derecha, eligiendo masivamente al partido conservador. Con ello se señala por parte de tales medios que existe un amplio apoyo a las propuestas electorales de tal partido, que se centran en la necesidad de hacer recortes masivos de gasto público. Rajoy señaló en campaña que, excepto las pensiones, ningún otro capítulo del presupuesto se salvaría de las reducciones de gasto público.
La victoria del PP se está presentando, pues, como una victoria abrumadora, utilizándose el término tsunami con gran frecuencia. Y como muestra de este tsunami se presenta el mapa electoral de España cubierto de azul, el color del PP, excepto en Catalunya y en el País Vasco. Tal tsunami se presenta también como un mandato para hacer políticas de austeridad. Por cierto, en Catalunya, la victoria de CiU también se ha presentado como una aprobación masiva por parte del pueblo catalán de las políticas de recortes que ha realizado tal partido en el Gobierno.
En todas estas interpretaciones se ignora la escasa calidad democrática del sistema electoral español. Veamos los datos. El PP consiguió sólo el 30% del voto del censo electoral, es decir, de todos los españoles adultos que podían votar. Ello quiere decir que el 70% no le votó. No es cierto, por lo tanto, que el pueblo español que incluye, además de los votantes del PP, a los abstencionistas y a los votantes de otras opciones políticas, haya dado su apoyo al PP y a sus políticas de austeridad. La gran mayoría del pueblo español no votó al PP, ni apoya sus políticas.
Es más, los datos tampoco confirman que haya habido un movimiento del pueblo español hacia la derecha. El voto del PP fue del 30,27% de todas las personas que podían votar, que fue sólo un 0,96% (repito, sólo un 0,96%) más del que consiguió en 2008 en las anteriores elecciones legislativas (un 29,31%). Es difícil sostener que ha habido un tsunami a favor del PP, la expresión utilizada en la mayoría de los medios. Continúa siendo un partido que, bajo un sistema proporcional que diera el mismo peso a todos los votos, sería minoritario. Su aumento acentuado de número de parlamentarios se debe primordialmente al colapso del PSOE, que pasó de representar el 32,19% del censo electoral al 19,49%, precisamente por haber hecho los recortes que ahora el PP quiere expandir. No es coherente argumentar que hay un mandato popular para realizar las políticas de austeridad del PP cuando el PSOE fue expulsado del Gobierno precisamente por llevar a cabo tales políticas.
Una situación incluso más acentuada ocurre en Catalunya con CiU. Este partido consiguió sólo el voto del 18,8% de todos los catalanes que podían votar, lo cual quiere decir que el 81,2% no le votó. Deducir de ello –como ha concluido el presidente de tal partido y de la Generalitat– que el resultado de las elecciones es una muestra de apoyo del pueblo catalán a sus recortes es una lectura excesivamente sesgada que carece de credibilidad. Aquí, de nuevo, el hecho de que se presentara a toda Catalunya bajo los colores de CiU se debe predominantemente al descenso tan notable del PSC, que pasó de cosechar el apoyo de un 31,74% del censo electoral (de todos los catalanes que podían votar) a un 17,1%, resultado en gran parte de la identificación del PSC con los recortes del Gobierno Zapatero.
No hay, pues, un mandato popular para que el PP o CiU realicen las políticas de recortes, si por mandato se entiende el deseo de la mayoría de la ciudadanía. En realidad, las encuestas que tenemos disponibles muestran que la mayoría de la población no está de acuerdo con tales políticas, favoreciendo otras alternativas, muchas de las cuales ni siquiera están siendo consideradas (encuesta del CIS de 2010 y 2011).
Vemos, pues, que el partido que gobernará es un partido minoritario entre la población española, aunque tenga gran mayoría en escaños. De ahí que cuando el Movimiento 15-M denuncie a las Cortes españolas por realizar las políticas impopulares de recortes, por no representar a la mayoría de la población, llevará toda la razón, pues representarán sólo a una minoría. El PP tendrá un control casi absoluto sobre los aparatos del Estado sin que le haya votado la mayoría de los españoles, por mucho que los medios pinten en azul el mapa de España. No hay duda de que, de llevarse a cabo tales políticas de recortes, además de generar gran conflicto social, desacreditarán todavía más a la clase política y a la democracia española. Las nuevas generaciones, educadas ya en valores democráticos, son más exigentes que las que les precedieron y no aceptarán la democracia limitada que tenemos, resultado de una Transición inmodélica que determinó una democracia incompleta, responsable de un bienestar insuficiente.


VOTAR2011®
De Laboratorios Pfizeer



Durante la campaña electoral, ningún partido político ha hecho alusión alguna al otro 20N, si ,ese 20 de noviembre de hace 36 años, ¿será por dar esa imagen de “responsabilidad y fortaleza democrática”?, ¿acaso algún partido político pretendía meter un poco de publicidad subliminal?,¿quisieron los partidos y gobierno quitar el significado al 20N ,dandole la importancia que merecen? O ¿habrán aceptado por fin, que en otro 20N, solo viajaba en el ataúd un cadáver, sin que le acompañara el sistema totalitario que representaba? En aquel 20N el sistema se envolvió en su crisálida, para renacer como una democracia, calcada a la de los otros países que comparten hemisferio, un sistema mejorando principalmente en su camuflaje de “gobierno del pueblo”, dejando en segundo plano el control férreo y manteniendo su doctrina de miedo e ignorancia. El renovado sistema  mantiene estructuras y jerarquías que son más difíciles de detectar, pero una elite social sigue gobernando al pueblo, antes identificábamos su sistema como: franquismo, dictadura, fascismo, nacional socialismo,… y ahora como: capital, neoliberalismo, poder económico, mercados…esta elite autoritaria tienen mil nombres y mil caras.

Antaño en el credo del perfecto dictador rezaba algo parecido a …El poder se mantiene no solo con la represión del libre pensamiento, además se debe controlar la parte de la sociedad que siempre se mostrara insurrecta, no se debe ejercer una represión directa, hay que dejar que fluya la crítica, pero siempre controlando la reacción del individuo ante nuevos planteamientos políticos y o sociales. Estos sistemas de control sobre la insurrección, lo ejercen; grandes sindicatos controlados, medios de comunicación y partidos políticos desacreditados socialmente.

Ahora, Para que el sistema sea sostenible Los poderes económicos primero identifican la inevitable discrepancia que surgen en los distintos grupos sociales, a continuacion tratara de incluirla en el sistema; convirtiendo la disidencia en un producto, del cual se pueden obtener beneficios. para finalizar, abordaran el problema como si de una enfermedad endémica se tratara: aislamiento y tratamiento de los enfermos. Para los poderes económicos nuestra enfermedad es la rebeldía, es  la  insurrección, es la búsqueda incansable de justicia social, en resumen, es cualquier acto o idea que pretende romper con el estado de sitio ideológico al que nos tienen sometidos los mercados.



Lo dramático de esta situación, es que la sociedad mayoritariamente, no se plantea otro sistema político; el que ahora tiene, le proporciona la dosis justa de democracia, que para colmo, no es más que un placebo:





·         Presentación: VOTAR2011® es un medicamento que se presenta en un envase de mediocre democracia y que para nada es genérico ¡vade retro!

·         Composición: cada 100cl contiene; Allium sativum(ajo) en un 49% , H2O(agua) en un 49% y  C12H22O11(azúcar) en un 2%

·         Indicaciones : VOTAR2011® es un medicamento para el tratamiento de los efectos producidos por la busqueda de igualdad social, busqueda de justicia…etc, o cualquier sintoma de desavenencia con el sistema

·         Posología: en mayores de 18 años, tómese una dosis cada cuatro años

·         Efectos adversos: puede producirse cambios estructurales, en los cuales, usted no podrá decidir. Si usted está embarazada o cree estarlo, sepa que ya no dan 2500€ .
    Si usted está en paro o cree que vaya a estarlo VOTAR2011®  no es el tratamiento eficaz para sus síntomas, en todo caso puede quedar reducida su prestación por desempleo.
   Si usten se plantea si VOTAR2011® es un medicamenteto justo, sepa que usted es un suversivo , consulte a su farmaceutico constitucional

·         Contraindicaciones: VOTAR2011® no proporciona solucion si usted va a ser envargado o desauciado.
   Si usted tiene actualmente un puesto de trabajo VOTAR2011®  no produce soluciones a la inevitable desintegración de sus derechos laborales.
    VOTAR2011®  está contraindicado para pacientes que vean útil apoyar a partidos minoritarios, se ha observado en nueve de cada diez casos, que el paciente se crea falsas esperanzas, las cuales, a largo plazo, producen una irritación profunda del cortex cerebral.

·         Sobredosis y su tratamiento: ni se le conoce, ni se le espera

Así pues, poco importa el  color de las banderas que se agitaron  con  ingenua esperanza en la noche del 20 de noviembre, los mercados seguirán devorando la capacidad de decisión colectiva. Si este gobierno o aquel otro es un obstáculo; lo sustituirán  por otro afín a sus intereses, sin dar la menor importancia, al resultado de cualquier tipo de sufragio.
Los poderes económicos….
·         Harán una reforma del mercado de trabajo (cuando lo primero que deberían hacer es dejar de mercadear con el trabajo, que manera más desafortunada de juntar dos palabras) creando ese deseado contrato único, que tendrá su completa flexibilidad como máxima virtud. El empleador podrá ofrecer un contrato desvinculado de derechos colectivos, un contrato formalizado sin necesidad de especificar; duración, distribución de jornada, indemnización o salario.
·         Reducirán el coste del despido, Y eso que todavía no han conseguido explicar, cómo esta medida, reduce el número de parados, a no ser, que la CEOE este chantajeando al gobierno negándose a realizar nuevos contratos, cosa de lo más absurda.


·         Harán una reforma en profundidad de la negociación colectiva, que pondrá por encima de la ley, cualquier decisión que se tome en el seno de una empresa, sin importar convenios colectivos, estatuto o Reales Decretos.
·         Harán todo lo posible para que al final, sea el trabajador el que se subvencione su despido e incluso, su propia prestación por desempleo.
Pero el éxtasis de sus reformas llegara cuando se excluya del orden jurídico las relaciones laborales.
Nuestro problema no es que ahora gobierne la otra derecha, ni que prácticamente no exista la izquierda, ni si es justo o no el sistema electoral,  el problema es la sociedad en sí; seguimos siendo una sociedad adormecida políticamente, seguimos fieles a una fantasía, que versa sobre la profunda creencia en que esta mal llamada democrácia, es la unica garantia de justicia, donde los ciudadanos somos los que obstentan el poder al decidir, cada cuatro años, que cara tendrá la marioneta de los mercados. A esta ensoñación, hay que sumarle la otra ingenua fantasía; en la cual, los poderes económicos nos necesitan como consumidores compulsivos y por lo tanto, no dejaran que nos ahoguemos en nuestra deuda.
El papel de los grandes sindicatos como instrumento para despertar consciencias, para defender y conquistar derechos , ha quedado enterrado por una losa de desconfianza, los ciudadanos, no consideran de utilidad alguna la afiliación, para hacer frente al ataque sistemático del estado contra sus propios miembros. Que UGT es el sindicato del PSOE está más que claro, y que ahora serán los primeros en convocar movilizaciones, también.


Pero, que en el último discurso del secretario general de CCOO, en el palacio de vista alegre el 24 de septiembre, únicamente volviera a reclamar más negociación y que tuviéramos fe en la supuesta izquierda europea (pero la del PSOE y amigos se entiende) , fue un momento muy triste. En Vista Alegre se concentraron más de 20.000 liberados sindicales, para darles la charla de siempre; decirles que el sindicato son ellos, que lo hemos pasado mal, que nos critican mucho, que los malos son muy malos bla blablabla pero como respuesta ante la modificacion de la constitucion y al eterno contrato parcial ; que nos estemos quietecitos y calladitos, de movilizaciones generales nada, ni siquiera avisos claros a partidos y empresarios, vamos que dio una sensación de que el señor Toxo, despues de las elecciones autonomicas y municipales del 22 de mayo, no se atrevia a entrar en plantemientos mas agresivos.
Así que cuando creíamos que ahora, tocaba la revancha de hace un año, para sentirnos orgullosos de nuestra afiliación, nos dieron otra dosis más de VOTAR2011®, menos mal que unos cuantos salimos a tomar unas cañas, dejando a los que soportaban el tedio, qué continuaran con su profundo onanismo.


Si ya hemos tenido suficiente, si ya empezamos a despertar de nuestro letargo, si ya se nos estan pasando los efectos del VOTAR2011® ,debemos plantearnos, si es cierto que los grandes sindicatos y partidos politicos, se han convertido en una prolongación del verdadero poder, ejerciendo el protagonismo en el control de la revolución social.
Si queremos dejar se de ser parte del problema, CCOO y UGT deben recuperan la fortaleza ideológica de antaño, si no, quizás tengamos que emplear nuestro esfuerzo insurrecto en otros movimientos sociales.
ENLACES: